Con el objetivo de conservar los seis faros apostados desde el extremo norte al sur de toda la provincia, el suboficial principal hidrógrafo, Alejandro Borda, dialogó con El Sureño para brindar detalles de las tareas de conservación y restauración del faro Páramo, señalando que se llevarán adelante «trabajos de pinturería, carpintería y herrería; mientras que el año próximo se tratará de hacer el tratamiento de albañilería».
«Esto es parte de un plan a nivel nacional, pero especialmente provincial, porque el jefe del Departamento de Balizamiento en Buenos Aires, capitán de Fragata Juan Carlos Nicolau, le está dando prioridad a todos los faros de la Patagonia, y especialmente a los que se encuentran en Tierra del Fuego».
Borda explicó que la totalidad del Departamento de Balizamiento de Río Grande -seis personas- se encuentra abocada a estos trabajos de restauración, los que se pueden extender entre 7 y 15 días, y que comenzaron en febrero pasado con el mantenimiento realizado en el faro Magallanes.
El faro «Páramo» fue puesto en servicio el 25 de marzo de 1924 y cuenta con una luz blanca que destella cada 7 segundos, con un alcance de 10,3 millas náuticas. Posee una elevación sobre el nivel medio del mar de 22,5 metros y sus características de construcción se destacan por tratarse de una torre troncopiramidal metálica de 17,5 metros, con una pequeña casilla de acumuladores al pie.
«Cada faro está ubicado en un sitio estratégico de la provincia y guía a los navegantes, por lo que la importancia de esto para el personal radica en mantenerlos lo mejor posible», concluyó.
Información del faro.
Coordenadas: 53° 09' S, 68° 13' W
Altura de la estructura: 17,5 m
Altura respecto al nivel del mar: 22,5 m
Puesto en servicio: 31 de marzo de 1924
Alcance geográfico: 12,7 millas náuticas
El faro Punta Páramo se encuentra ubicado en el extremo sur de la Península El Páramo, enmarcando el sector norte de la Bahía de San Sebastián, en la Isla Grande de Tierra del Fuego.
Su iluminación está dada por un tipo de linterna AGA de 40/40 watts, alimentada por baterías solares. Su destello es de 0,5 segundos cada 7,5 segundos.
Este tipo de península, de varios kilómetros de largo y escasos 1000 metros de ancho, es denominada "espiga", y su génesis está relacionada a la deriva litoral marina, en este caso de dirección hacia el sur.
La topografía de este accidente geográfico es muy baja, lo que sumado a su escaso desarrollo lateral, hacen de este accidente un obstáculo muy dificultoso de identificarlo desde las embarcaciones en las cercanías. Su balizamiento subsana este inconveniente.
En las cercanías de este lugar, el ingeniero rumano Julio Popper construyó en 1887, instalaciones para la explotación de los placeres auríferos de la zona. Se trataba de un emprendimiento que involucraba la cantidad de 80 peones, que llegaron a concentrar 500 gramos de oro por día.
En las cercanías de este lugar, el ingeniero rumano Julio Popper construyó en 1887, instalaciones para la explotación de los placeres auríferos de la zona. Se trataba de un emprendimiento que involucraba la cantidad de 80 peones, que llegaron a concentrar 500 gramos de oro por día.